CIUDAD DEL VATICANO, 2 de
diciembre, 2003 --
Obispos y cardenales que esperaban asistir a una proyección especial en el
Vaticano de una polémica película de Mel Gibson sobre Jesucristo tendrán que
esperar un poco más, dijo la estrella de Hollywood en un comunicado.
La selecta audiencia esperaba un pase privado de "La Pasión de
Cristo" el martes por la noche como parte de una convención sobre
espiritualidad en el cine.
Sin embargo, la compañía Icon Production de Gibson informó a los
organizadores por correo electrónico el lunes por la noche que el actor y
director seguía trabajando en la versión final y les pidió que esperaran porque
"sólo faltan unas semanas para acabar la película".
El filme, que recoge las 12 últimas horas de la vida de Jesucristo, ha sido
objeto de críticas por parte de algunos grupos judíos que denuncian que podría
fomentar el antisemitismo al describir a las autoridades judías como las
principales responsables de la muerte de Cristo.
Pero grupos católicos y otras organizaciones cristianas, así como
estudiantes de la Biblia, han defendido la película diciendo que se ciñe
estrechamente a las narraciones de la crucifixión recogidas en el Nuevo
Testamento.
Gibson ha defendido la película y negado que él y "La Pasión de
Cristo", que durante un tiempo se tituló simplemente "La
Pasión", sean antisemitas.
Los organizadores del festival de cine religioso dijeron que la compañía de
Gibson había prometido un pase privado para autoridades del Vaticano y expertos
en religión antes de que se estrene el filme en Estados Unidos el 25 de febrero
del próximo año.